Prácticamente todos los restaurantes lo que buscan es vender sus productos en grandes cantidades. Para llegar a eso utilizan la psicología, la mercadotecnia y el diseño, entre otras estrategias, para llamar la atención de los clientes y una vez que se acercan y les resulta atractivo al paladar, no pueden irse sin consumir algo.

Normalmente utilizan el color rojo para estimular el apetito; algunos restaurantes pintan las paredes del lugar con este color, otros lo usan en empaques. Se supone que el color rojo eleva la presión sanguínea, la frecuencia cardíaca y los deseos de comer, por eso usan manteles y otros tipos de decoración. Los colores naranja, amarillo y rosa dan un efecto similar a éste.

Otro factor es el aroma; para cuando decidimos qué comer, no puede existir mejor mercadotecnia que un olor agradable que nos invite a comer, por eso muchos restaurantes colocan sus hornos enfrente del local, cuando nuestro olfato identifica un olor que nos resulta atractivo, aumenta la producción de ghrelina, que es una hormona que estimula nuestro apetito, nuestro cerebro lo interpreta como hambre, y  es el momento en el que terminamos haciéndole caso a nuestro olfato.

Como se sabe, una imagen vale más que mil palabras, por eso la publicidad tiene fotografías perfectas; otra forma visual de llamar la atención es el uso de espectaculares gigantes que anuncian los locales.

Un estudio de salud pública demostró que, en lugares donde se encuentran más espectaculares de comida, la población consumía más de ese restaurante y por lo tanto representaba mayores ventas para ellos.

Algunos restaurantes utilizan música clásica y jazz, haciendo que los clientes permanezcan adentro por más tiempo, pero consumen menos, por esa razón en los restaurantes de comida rápida, la música siempre tendrá un ritmo movido. También se sabe que la música relajada hace que los clientes consuman menos calorías.

La luz ambiental también juega un papel importante, entre más fosforescente y artificial, la gente solo quiere comer y salir, así que dependiendo del tipo de restaurante, tomarán la luz a su beneficio.

Ahora que ya conocemos algunos de las estrategias que utilizan los restaurantes, para que gastes en su comida, queda en cada quien decidir si se rinden ante ellos o los evitan.

@38consumer