Las estadísticas revelan que los clientes positivos y felices, están dispuestos a invertir más dinero en sus compras.
En las películas y series de TV, siempre nos han pintado que entre más triste o deprimido estás, más propenso eres a comprar, porque eso te puede alegrar. Pero según estudios recientes se ha demostrado que esto puede ser totalmente al revés; y es que vamos a pensar: cuando estás triste no quieres salir de tu casa, no tienes ánimos de ver a nadie, lo único que deseas, es estar bajo las cobijas, viendo Netflix y hasta se te quita el apetito.
Sin embargo, cuando estas feliz esto cambia, piensa en cuando sales con tus amigos o tu pareja, quieres hacer de todo, probar de todo, comer cuantas cosas nuevas hayan inventado, quieres darle todo a esa persona especial, tienes toda la actitud de entrar a las tiendas a “echar un vistazo” y terminar comprando todo lo que encuentres.
Estudios demuestran que, cuando el consumidor se encuentra en un estado de relajación, emoción y optimismo, puede llegar a gastar en promedio un 12% más de lo que gastaría si su humor no es bueno. Esto debido a que desea mantener ese estado, no importa lo que cueste. Es ahí donde las empresas deben aprovechar para introducir sus productos, agregar algo a su lista de compras, o convencerlo de que necesita tu producto para seguir sintiendo esa felicidad.
Un ejemplo de cómo la tristeza puede afectar negativamente a los consumidores es la etapa de crisis que se vivió en España. Entre 2007 y 2014 el gasto de las familias se redujo un 8.6%; en 2008 justo antes del estallido de la crisis, la reducción del gasto llegó a su punto más bajo, con un 12%.
El mejor ejemplo de que al estar feliz se puede incrementar el gasto del consumidor es en Disneylandia, donde la diversión, las emociones y las aventuras no son solo para los más pequeños de la familia, Disney hace uso de este “Modus operandi” y ha creado la forma de tener un espacio donde todo es felicidad y alegría, lo que representa mayor gasto en sus parques y tiendas.
Como marca, puedes obtener resultados de esto, al crear un ambiente que promueva el sentimiento de bienestar, tranquilidad y felicidad en tu negocio, ya sea físico o virtual, haz uso de colores, olores, texturas, luces, personas y todo lo que sea necesario para lograrlo.
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